Finalizan las obras de protección contra desprendimientos en la carretera regional que une Abarán y Blanca

Han supuesto una inversión regional de 190.400 euros

La Consejería de Fomento e Infraestructuras finalizó las obras de estabilización y protección contra desprendimientos en la carretera regional que une Abarán y Blanca (RM-514), que han supuesto una inversión de 190.400 euros. La actuación se ha llevado a cabo en los últimos tres meses y ha consistido en instalar dos mallas a ambos lados de la vía con el fin de proteger sus laderas.

El director general de Carreteras, José Antonio Fernández Lladó, informó hoy en Abarán de la conclusión de las obras que refuerzan la seguridad vial de 1.024 vehículos que diariamente transitan por la carretera.

"Gracias a la estabilización de los taludes de la trinchera se van a evitar los desprendimientos de gravilla y de rocas de más entidad de las partes superiores", explicó Fernández Lladó.

El responsable regional señaló que en el talud izquierdo de la vía se ha instalado una barrera dinámica de protección contra desprendimientos que tiene una gran capacidad de absorción de energía. Además, en la parte situada bajo la barrera se ha colocado una malla cortina para sujetar algunas rocas de tamaño significativo. También se ha instalado un disipador de energía, por encima de la barrera, para impedir que los rebotes en esa zona superen en altura a la barrera.

En el otro lado de la vía, en el talud derecho, se ha colocado una malla cortina con el fin de sujetar las rocas y estabilizar una pequeña parte triangular del talud.